Menhir cristianizado

La región cuenta con numerosos megalitos de finales del Neolítico, como el menhir de Villars, cristianizado en el siglo XVI.

La aparición de megalitos en la zona de Clermont Auvergne Métropole se remonta a finales del Neolítico. Todos los menhires son de granito, y la piedra utilizada suele proceder del desfiladero de Ceyrat. Los bloques, que pesan varias toneladas, se transportaban desde el lugar donde se extraían hasta el lugar donde se erigían. Estos monumentos parecen marcar un territorio, una frontera, un paso. Siempre están colocados en un lugar prominente.

El menhir de Orcines, en el pueblo de Villars, es un bloque de granito porfiroide de grano grueso procedente del Puy de Dôme. Fue cristianizado en el siglo XVI, cuando se le añadió una cruz de basalto en la parte superior. La cruz está tallada con un Cristo a cada lado. El conjunto mide alrededor de 1,80 m de altura sobre el suelo. El menhir parece haber permanecido en su posición original a pesar de la urbanización progresiva del lugar.

Hay otros tres ejemplos conocidos de megalitos en la zona: el menhir del Pont d'Aubière, conocido como pierre piquée, en Aubière (declarado Monumento Histórico en 1971), el menhir de Beaulieu, Sainte-Anne o Pierre Longue, La grande borne, en Clermont-Ferrand (declarado Monumento Histórico en 1924) y el menhir de Sarre en Clermont-Ferrand (declarado Monumento Histórico en 1965). Durante las obras de ampliación de la autopista A75 en Le Douleix, en la comuna de Veyre-Monton, las excavaciones arqueológicas de 2018 revelaron alineaciones de menhires nunca antes vistas en Auvernia.